CRÓNICA DE AMÉRICA

Barcelona, Quinto Centenario de América, Editorial Plaza & Janés, 1990. 224 págs.
ÍNDICE
PRINCIPALES PERIODOS DE LA CRÓNICA DE AMÉRICA
Crónicas del año 3900 al 1301 a de C..................................................................................................17
La consolidación de las culturas americanas del 3000 a de C al 300 d de C..............................27
Crónica del año 1300 a de C al 299 d de C.........................................................................................29
Del esplendor a la ruina de las civilizaciones americanas del 300 d de C al 1525.................59
Crónica del año 300 d de C al 1490.....................................................................................................59
El ciclo colombiano del 1492 al 1506...................................................................................................122
Crónica del año 1490 al 1509...............................................................................................................124
Los grandes descubrimientos y conquistas del 1506 al 1550........................................................148
Crónica del año 1510 al 1549...............................................................................................................150
La configuración de la América hispanoportuguesa del 1550 al 1600.......................................187
Crónica del año 1550 al 1599...............................................................................................................189
El siglo XVII o la proliferación de colonizaciones europeas del 1600 al 1699............................211
Crónica del año 1600 al 1699................................................................................................................213
América en el siglo de la Ilustración del 1700 al 1808...................................................................255
Crónica del año 1700 al 1807................................................................................................................257
Las nuevas repúblicas, dos modelos de desarrollo del 1808 al 1850...........................................322
Crónica del año 1808 en 1824...............................................................................................................324
Crónica del año 1825 al 1849................................................................................................................362
América Latina en la división Internacional del trabajo del 1850 al 1929................................409
Crónica del año 1850 al 1879................................................................................................................411
Crónica del año 1880 al 1828................................................................................................................468
Desarrollo y dependencia del 1929 y 1959.......................................................................................561
Crónica del año 1929 al 1959...............................................................................................................563
Desarrollismo e Independencia desde 1960....................................................................................639
Crónicas del año 1960 al 1989.............................................................................................................641
Apéndices
Gobernadores........................................................................................................................................702
Presidentes............................................................................................................................................718
Biografías...............................................................................................................................................723
índice......................................................................................................................................................747
PRESENTACIÓN
De todas las provincias españolas de América - escribieron los hermanos Reclus, en su Geografía Universal, hace más de un siglo - ninguno tuvo la capital tan apartada del mar, y por tanto del resto de la nación como Nueva Granada, circunstancia que pesó mucho en su historia, y a la que en gran parte de Bogotá haber conservado su carácter propio. De estas premisas, seguían deduciendo una serie de condiciones de que Colombia fuera más resistente a la invasión de ideas y modas extranjeras, razón de que haya conservado mejor que otras repúblicas sudamericanas su carácter propio. Tanto en el abastecimiento básico de sus necesidades como en la resolución de los problemas más graves de su existencia histórica - comenzando por el curso de su lucha por la independencia, Colombia no sólo ha debido y sabido remediar a solas sus dificultades, sino que en ocasiones señaladas incluso ayudó a sus hermanas, como ocurrió entre 1823 y 1826 enviando tropas hasta Potosí y Chuquisaca para respaldar a Perú y Bolivia.
Desde el trágico resquebrajamiento de la Gran Colombia bolivariana, ha vivido el país las tensiones que derivan del tener una historia, una geografía y una sociedad que no se superponen con exactitud. Bryce Echenique ha hablado de las nuevas naciones sin nacionalistas, donde los políticos ilustrados de la primera hora luchan por dar forma política a unas inmensidades territoriales y forma económica a unas riquezas desordenada, ocultas y mal asignadas. Octavio Paz ha diagnosticado la impotencia de los esquemas intelectuales frente a los hechos, que corrobora que nuestros reformadores no tuvieron la imaginación de los misioneros del XVI ni su realismo. Al indianizarse, el cristianismo arraigó y fue fecundo. Algo semejante debieran haber intentado nuestros reformadores. Podían haber deducido la moraleja entrañada en la flexibilidad con que se admitió pronto en la ciudad fundada en 1538 a 2611 metros de altura, por Jiménez de Quesada, con el nombre de Santa Fe, fuese conocida por la expresión autóctona de Bogotá, como si la corteza oficial transigiese cordialmente con el contenido efectivo del país.
Tiene Colombia para completar su grandiosa imagen una riqueza singular: la de valer tanto o más en su semblante del océano Pacífico que en el de su sólida masa continental asomada al Caribe, siendo así la única nación sudamericana - como Chile, pero en forma muy distinta - que tiene costas en los dos océanos. La fachada colombiana al Pacífico está llena de promesas y ofertas para el futuro,
tan grandiosa como lo es el ilustre majestuoso de Cartagena, la tradicional Cartagena de Indias en el litoral atlántico. La alusión a Cartagena y sus atemorizadoras fortificaciones no puede dejar de atraer una reflexión muy hispánica, y por tanto muy colombiana también: aquella plaza fortísima ante el repetido atacante exterior, era un hervidero de discordias y rencillas entre sus conventos, sus tribunales. sus autoridades, conflictos que siempre pagaban al más débil. Acogido al amparo de su imagen, el cartagenero sencillo rezaba la <<Virgen de la Candelaria, morenita y liberal>>. La política moderna ha añadido otros sentidos a los de estos dos vocablos coloniales. Ojalá puedan siempre sumarse sin restarse.
Pedro Voltes